Si tienes tantas cosas por hacer que te cuesta poner al día tu casa, sigue leyendo. Te dejamos algunos consejos que te pueden ayudar a que tu hogar sea seguro, funcional y cómodo.
Revisión de tu vivienda
Llevar un buen mantenimiento te ayudará a prevenir daños y repararlos antes de que sean mayores. Por eso es importante revisar tu hogar cada cierto tiempo. Una forma de hacerlo es dividir tu vivienda por zonas y en cada una de ellas comprobar todo aquello que pueda tener algún deterioro.
Las tareas sencillas podrás realizarlas tú mism@. Pero en averías más complejas, no dudes en contratar un profesional, te asegurarás de que el problema esté solucionado de forma segura y correcta.
Te dejamos una lista con 9 sugerencias para un buen mantenimiento:
- Humedades: comprueba si existen humedades en paredes o techos. Si las hay, revisa de dónde vienen y si existe algún tipo de filtración. Solucionar esto es urgente, ya que puede suponer un problema de salud.
- Pintura: pintar las paredes es una tarea que mejora la higiene y la estética de tu hogar. Puedes buscar un tipo de pintura lavable o antihumedad, por ejemplo. Es importante solucionar el punto anterior antes de empezar a pintar.
- Sistema eléctrico: tienes que prestar mucha atención al sistema eléctrico por tema de seguridad. Hay tareas sencillas que podrás realizar tú mism@, como cambiar una lámpara o un interruptor, y otras más complejas para las que necesitarás contratar a un profesional.
- Climatización, calefacción y aires acondicionados: Asegúrate de que todo funciona correctamente. En el caso de los aires acondicionados, cambia o limpia los filtros.
- Grifos y tuberías: revisa que estén en buen estado y no haya atascos o fugas.
- Ventanas y puertas: comprueba que los burletes de ventanas y puertas no tengan agujeros o desgarros, ya que por ahí se producen fugas de calor o frio. También pueden entrar insectos. Sustitúyelos si es necesario.
- Suelos y paredes: busca si existen baldosas o azulejos sueltos, y fíjalos bien para prevenir accidentes. Ten cuidado con las grietas, consulta con un profesional ya que puede ser algo más importante de lo que parece.
- Fijaciones: los tornillos y clavos se aflojan con el tiempo, por lo que es bueno ajustarlos cada cierto tiempo. Revisa barandillas, sillas, mesas, etc.
- Instalaciones de gas: si tienes gas en casa, comprueba que los conductos estén en buen estado y no hayan fugas. Si encuentras algún desperfecto, consulta con un profesional.
Planificación y presupuesto
- Haz Listado de Tareas a realizar a corto, medio y largo plazo.
Una vez realizada la revisión de tu hogar haz un listado para organizar las distintas tareas y separar las que tienes que solucionar a corto, medio y largo plazo. De esta manera podrás planificar los tiempos y no se olvidará ninguna tarea.
- Destinar un presupuesto para mantenimiento general e imprevistos.
También es interesante destinar un presupuesto para el mantenimiento de tu hogar, tanto para las tareas planificadas como para los posibles deterioros e imprevistos. De esta manera sabrás cuánto vas a gastar y evitarás sustos.
Llevar a cabo las tareas de mantenimiento
- Reparaciones a corto plazo:
Empieza por solucionar las averías que ya existan, es posible que si se aplazan empeoren.
Trata de realizar las tareas sencillas y detectadas en el mismo momento, por ejemplo, cambiar una lámpara o ajustar un tornillo. De esta manera no se acumularán cosas pendientes.
- Tareas a medio plazo
Planifica aquellas tareas que conllevan más tiempo o necesitan de algún material o herramienta que no tenemos. Pon una fecha concreta y ten todo preparado para ese momento.
Cuando haya que hacer reparaciones más específicas, como cambios de tuberías, tubos de gas, problemas eléctricos, etc., tendrás que contactar con un profesional.
- Mantenimiento a largo plazo
Cada varios años es posible que haya que hacer algún tipo de reforma como cambiar ventanas para mejorar el aislamiento, o sustituir la lavadora por desgaste. Ten en cuenta esto y mételo en el presupuesto para que no te coja por sorpresa.